
El presidente Barack Obama estableció un nuevo precedente para reconocer los derechos indígenas cuando firmó la Ley de Asignaciones de 2014. La Ley incluye el lenguaje para ayudar a garantizar que las comunidades mayas de Achi en Guatemala finalmente sean compensadas por el daño y las injusticias causadas por la construcción de la presa Chixoy.
Treinta y tres comunidades fueron despojadas de sus tierras, casas y cultivos para dar paso a la presa hidroeléctrica de Chixoy construida a principios de la década de 1980. El proyecto fue financiado por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo.
Estamos orgullosos de haber trabajado junto a Advima para crear conciencia entre los legisladores sobre estas graves injusticias y la necesidad de reparaciones.
Además de abordar específicamente la reparación debido a la Maya Achi, la Ley reconoce que el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y otras instituciones financieras internacionales deben responsabilizar por las violaciones de los derechos humanos que resultan de su financiamiento. Este es un avance crítico para la defensa de la reforma de políticas del Centro, lo que refuerza nuestra posición de que las políticas de los bancos deben mejorarse para proteger mejor los derechos de los pueblos indígenas regional y globalmente.
Continuaremos monitoreando la implementación del plan de reparaciones para el Maya Achi y continuaremos desafiando las políticas actuales dentro de los sistemas bancarios internacionales para proteger mejor los derechos indígenas a tierras y recursos.
Declaración del coordinador de las comunidades afectadas por la construcción de la presa Chixoy (Cocahich):